Ciénaga de Mallorquín, nuevo destino ecoturístico de Barranquilla

Tras la presentación la semana pasada de la primera etapa del Ecoparque Ciénaga de Mallorquín por parte del alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo  Heins, éste ya ha recibido visitantes este fin de semana, convirtiéndose en el primer destino ecoturístico de la urbe. 

Tanto los barranquilleros como los turistas ahora pueden disfrutar de un paseo de 4.5 kilómetros entre manglares, aves y el hermoso cuerpo de agua salobre. Este lugar, que estuvo olvidado durante décadas, hoy alberga más de 188 especies de fauna y flora, que tanto los locales como visitantes pueden conocer.

El alcalde expresó su agradecimiento a la comunidad y a todas las entidades y organizaciones que hicieron posible rescatar este valioso ecosistema. Además, destacó que el ecoparque ofrecerá actividades recreativas y deportivas para cerca de 7.000 personas diariamente. ¡Será un lugar perfecto para deportes acuáticos, avistamiento de aves, gastronomía y hasta investigación de soluciones basadas en la naturaleza!

Y eso no es todo, también se habilitará el tren de Las Flores y la playa de Puerto Mocho, ¡proyectos estratégicos que se conectarán para brindar una experiencia única a la ciudadanía! Esto no solo es una gran noticia para la conservación del medio ambiente, sino también para la generación de empleo y una mejor calidad de vida en Barranquilla. 

En cuanto al acceso al ecoparque, durante el mes de septiembre estará abierto los fines de semana, es decir, sábados y domingos;×y en octubre se habilitarán los días hábiles. Además, la recomendación es utilizar transporte público, ya que el parqueadero aún no está habilitado.

Es de destacar el trabajo conjunto con los aliados de este proyecto, como el Banco Interamericano de Desarrollo, el Banco de Desarrollo de América Latina, la Unión Europea y muchos más, que creyeron en esta iniciativa y contribuyeron a su financiamiento. ¡Es maravilloso ver cómo todos se unen para mejorar la calidad de vida de los habitantes de Barranquilla!

Según información oficial, la ciénaga de Mallorquín es una laguna costera y ecosistema lagunero que hace parte de los 2.250 km2 de la llanura aluvial septentrional inundable del río Magdalena.

Es una laguna/manglar costero en donde el agua dulce del Río Magdalena se mezcla con el agua salada del mar Caribe, formando lo que se conoce como agua salobre. La ciénaga hace parte del sistema de estuarios del sistema delta estuario del Río Magdalena y la Ciénaga Grande de Santa Marta.

En 1971 se firmó la “Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional” (RAMSAR), la cual es la principal autoridad intergubernamental sobre los humedales y procura velar para que las contribuciones, hechas por los humedales al bienestar humano, en todos sus aspectos, se reconozcan y fortalezcan en todos los sectores y niveles de la sociedad. Estos ecosistemas son lugares únicos, donde habitan especies animales y vegetales que solo pueden desarrollarse allí, por eso su gran importancia.