Cada 4 de agosto, en Colombia, se celebra el Día del Periodista en conmemoración a la circulación por primera vez en la ciudad de Bogotá del periódico "Papel Periódico de Santa Fe de Bogotá", dirigido por el sacerdote y escritor Manuel del Socorro Rodríguez. Este periódico se convirtió en el primer medio de comunicación impreso que circulaba en lo que hoy conocemos como Colombia. Así mismo en honor a los hombres y mujeres que nos dedicamos a informar, investigar y velar por la verdad en medio de un panorama complejo y desafiante.
En esta fecha, es crucial reflexionar sobre los retos que enfrentan los periodistas en el país, particularmente en lo que respecta a la libertad de prensa, as estigmatizaciones por parte de funcionarios y privados, los desafíos e inseguridad ante las elecciones territoriales, así como el impacto de la inteligencia artificial en el periodismo, todo ello bajo la lupa de la ética profesional.
Libertad de prensa y seguridad ante las elecciones territoriales
En octubre de este año se llevarán a cabo las elecciones populares y lo cual se convierte en un detonante para los riesgos de la libertad de prensa, la cual es un pilar para la democracia y el desarrollo de una sociedad informada, sobre todo a la hora de seleccionar a su aspirante favorito.
Sin embargo, en Colombia, los periodistas se enfrentan a constantes amenazas y todo tipo de violencias por parte de grupos armados y actores políticos, especialmente en las regiones afectadas por el conflicto y donde se disputa el poder territorial.
El ejercicio periodístico se vuelve más peligroso en épocas de elecciones populares, cuando los intereses políticos pueden chocar con la objetividad y la transparencia en la información. En estos momentos, los periodistas estamos abocados a hacer frente a todo tipo de presiones, censura y ataques para evitar la divulgación de hechos que puedan perjudicar a ciertos candidatos o favorecer a otros. Garantizar la seguridad y la libertad de prensa durante este período es esencial para asegurar que los ciudadanos tomen decisiones informadas y responsables en el proceso electoral, por lo que hacemos un llamado al gobierno local y nacional para que se den las garantías para el ejercicio profesional del periodismo.
A eso se suman las estigmatizaciones a periodistas, que parte de la generalización de alguna conducta o del inconformismo de estar bajo la lupa de la información. El poder de algunos funcionarios públicos pareciera darles el derecho para que los periodistas y comunicadores sean juzgados ante la sociedad, aprovechando la polarización política a la que está sometida. Cabe indicar, que el periodismo es parte esencial de la democracia ya que permite el acceso a la información y promueve así la transparencia y la rendición de cuentas a la que deben estar sometidos los miembros del gobierno, como los políticos y todo empresario o particular qué afecte los intereses públicos.
Según la Federación Colombiana de Periodistas (Fecolper) durante el 2022 se presentaron sistemáticas afectaciones contra periodistas, incrementada por la situación socio económica deplorable y en el informe publicado en febrero de este año, ya advertía del recrudecimiento de las violencias por cuenta del año electoral, que se convierte en otra amenaza más a la libertad de prensa, teniendo en cuenta las realidades locales de dominación de "clanes" o familias de poder gubernamental y un periodismo, que la mayoría en nuestras regiones, es dependiente de la pauta publicitaria.
Se espera que el 2023 no supere el año anterior que se consolidó con la cifra más alta de la última década de amenazas contra la prensa, en su mayoría la local y regional. Según la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), desde el 2020, cada año se impone un nuevo récord de amenazas contra periodistas, que a nuestro juicio no son acciones solo en contra de unas determinadas personas o medios de comunicación, sino que son las que pretenden en una especie de estrategia para mermar cada vez más la auditoría, propia del periodismo, sobre las acciones que tengan interés público, de forma tal que no haya profundidad ni investigación, y se ofrezcan informaciones amañadas a un interés particular, cercenando a través del miedo las voces críticas en el país.
El avance de la inteligencia artificial ha revolucionado la forma en que se recopila, procesa y presenta la información. Los periodistas ahora tienen a su disposición herramientas que agilizan la investigación y facilitan el análisis de grandes volúmenes de datos. Sin embargo, esta automatización también plantea desafíos éticos y profesionales.
La inteligencia artificial puede llevar a la propagación de noticias falsas o sesgadas, y los periodistas deben ser cautelosos al verificar la autenticidad de las fuentes y la precisión de la información. La inmediatez que brinda esta tecnología no debe comprometer la calidad y la veracidad de las noticias. Por ello, es necesario fomentar la formación continua en el periodismo digital, para que los profesionales estén preparados para enfrentar estos nuevos retos con responsabilidad y rigor.
Ética periodística: un faro en la profesión
En el entorno actual, en el que las redes sociales y la inmediatez han tomado el control de la divulgación de noticias, la ética periodística se vuelve más imprescindible y relevante que nunca. Los periodistas hemos de mantener altos estándares éticos, basados en la veracidad, la imparcialidad y el respeto por los derechos humanos.
La competencia por la primicia no debe conducir a la divulgación irresponsable de información no verificada o el sensacionalismo de eventos trágicos. Los periodistas hoy estamos llamados a ser conscientes del impacto que pueden generar las noticias en la sociedad y es preciso trabajar para fomentar el diálogo y la comprensión entre las diferentes perspectivas.
El Día del Periodista en Colombia es una oportunidad para reconocer y aplaudir el trabajo incansable de quienes ejercen esta noble profesión. Sin embargo, también es un momento para reflexionar sobre los retos que enfrentamos, ya que solo mediante un compromiso firme con la verdad y la integridad profesional, se pueden superar y continuar trabajando por una sociedad informada y democrática.
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